A la edad de 27 años, un desconocido director italiano de una banda de música de pueblo consiguió uno de los mayores triunfos de la historia de la ópera. Con esta obra, Pietro Mascagni fundó el verismo musical y se convirtió en una influencia para toda una generación de compositores.
Ineggiamo – un gran momento operístico
El himno de Pascua “‘Inneggiamo, il Signor non è morto” es uno de los momentos más destacados de la ópera. Santuzza canta un himno de Pascua frente a la plaza de la iglesia y es acompañada por el coro que canta dentro de la iglesia.
Maria Callas pone su alma en la música, llevando la voz a un celestial si bemol. Este pasaje es muy exigente para la cantante, en “Ineggiamo” la cantante tiene que cantar grandes emociones sobre una alfombra sonora de una enorme orquesta y coro.
Ineggiamo – Callas
Voi lo sapete – la gran aria de Santuzza
El oboe comienza dolorosamente con el motivo de amor:
Pero suena en un tono menor y es inmediatamente espantado por las emociones de Santuzza, que escuchamos en los feroces sonidos del violín.
Santuzza cuenta su amarga situación y aparece el motivo de los celos. Ella trata de ahuyentar los pensamientos, y el motivo del amor brilla ahora en clave mayor. Pero los pensamientos oscuros vuelven y el aria termina con la cita del motivo de los celos.
Escucha a Renata Tebaldi, una importante intérprete de Santuzza. Renata Tebaldi canta el pasaje de forma inquietante. La “voz de ángel”, como la llamaban, podía retratar musicalmente a personajes femeninos sufrientes con un inmenso dramatismo.
Voi lo sapete – Tebaldi
El famoso Intermezzo de Mascagni
El Intermezzo nos traslada a un ambiente siciliano. Es una maravillosa pieza para orquesta de cuerda que se ha hecho mundialmente famosa. Con esta pieza Mascagni vuelve a establecer un punto de descanso antes de la catástrofe de la última parte.
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